Ese Hotmail

21 Minutos de Lectura
0
(0)

Hotmail.. Gracias.. Esta es la historia:

Ayer al anochecer, algo inquietaba mi alma.

Una sensación poco frecuente asalto mi mente, al llegar del trabajo mi ser se inquieto, trate de distraerme al observar el televisor, pero aun mi mente divagaba. 

Trate de navegar por internet y sin en cambio no podía alejar esa extrañeza de mí. De pronto se me ocurrió depurar mi cuenta de correo.

 Mi mente, esbozo una sonrisa al ver miles de mails. Tenía una gran tarea por delante ya que nunca depure mi cuenta. Hoy me percato que tengo mail de todas formas, colores y personas.

 Empiezo, mmmm este era de cuando aprendía a usar el mail, pues adiós, este otro es de esa tienda departamental donde nunca compre, pero me suscribí para que me llegaran sus ofertas.  

Este otro es de mi otro compañero de trabajo, decía: «Houston, tenemos problemas» y aun así los pudimos resolver. Ahh ese otro, de la niña que conocí en un antro y jamás la volví a ver.

 Encuentro otros más recordándome de solicitar una tarjeta de crédito, algunos correo cadena que detesto tanto.

Ahh correos de mis conocidos que hoy en día se han ido, que el destino los separaron de mi camino. Interesante, correo recordándome renovar la suscripción de esa revista que nunca recibí.

Ohh no me había percatado lo tarde que es. Llevo varias horas leyendo lo que tenía en mi baúl de recuerdos virtuales.

¡Ya me cansé!

Seguiré otro día, ya casi amanece y creo que  mi mente se ha distraído lo suficiente como para olvidar a esa extraña sensación.

Estoy moviendo el mouse al botón de cerrar sesión.

Pero como imán mi vista se posa en un correo en particular, el tuyo ya han pasado años y lo leí en una sola ocasión.

 Hoy recuerdo muy bien ese día, llegue a la oficina como todos los días.

Saludando a todos los compañeros y preguntando como veían el avance al día de nuestros objetivos.

Como era costumbre encendía mi computador y después de entrar a los sistemas con sus usuarios y password, lo cotidiano era levantarme ir por un café.

Ese día no fue así, algo me hizo entrar a mi messenger, cuando se conecto me apareció el cartel de «Un nuevo correo» y entre en hotmail. 

Era tuyo y me extraño pues si tenías algo que decirme, lo más lógico era que me llamarás. Sabias que mi móvil, mi nextel siempre están encendidos y que en ese momento que lo enviaste yo estaba llegando a mi oficina.

Así que podías esperar a llamarme a mi línea directa. No decía nada, solo tenía una frase «Cuando el amor está a tu lado, solo tienes que voltear la mirada para ser feliz». Pensé que era un correo cadena, y sabes que no soy adicto a ellos.  Pero miro los destinatarios y solo me lo enviaste a mí.

¡Que extraño! De pronto las actividades laborales me llaman y cierro el correo.

Olvide de borrarlo y jamás lo volví a mirar.

Ahora lo entiendo, se porque me lo enviaste y comprendo lo que pasaba por tú corazón.

Después de ese día en que mi buzón electrónico apareció ese mensaje, seguimos frecuentándonos, seguimos riendo, saliendo hasta que un día tu tomaste un camino diferente al mío.  

Han pasado tantos años que ya no te recordaba y más que eso, no podía acordarme de ese viejo mail. No quise borrarlo, no pude en ese instante. 

Quise dormir un poco y no logre conciliar el sueño tu imagen estaba fija en mi mente. Cuantas preguntas pasaron por mi pensamiento y no pude encontrar respuesta alguna.

 Pasaron pocas horas y me tuve que alistar para comenzar un nuevo día en el trabajo, en mi vida. En el camino, aun no salías de mi mente, quería distraerme mirando a las personas que compartían mi viaje. Y no pude hacerlo, encendí mi iPod y quise entregarme a la música y no lo logro concentrarme en ella.

Llegue al trabajo, y me sumergí en ese mundo que me encanta. Llamadas por aquí, mail por acá, informes, decisiones.

De pronto todo estaba bien, transcurrió la mañana con gran actividad, se acerca la hora de la comida.

Tome mi saco y me dirigí a mi restaurante favorito.

Siempre salgo solo a comer y disfruto mis alimentos sin tener que conversar con alguien, sin dar o pedir opiniones de asuntos sin relativa importancia. 

Pero hoy me siento solo, más solo que nunca.

Volteo a mi alrededor y veo a un par de ancianos tomado un café y haciendo remembranza de que los tiempos anteriores son mejores, miro al niño que siente que su helado es el más grande del mundo y no desea atacarlo con su cuchara pues piensa que desaparecerá con junto con el jarabe de chocolate que acompaña a tan suculento postre. En la mesa más lejana esta la chica con su impecable traje tipo sastre y su portátil con una mueca de preocupación en su rostro, mientras se lleva un cigarrillo a la boca para encenderlo. Aqui a mi lado esta una pareja feliz, dando promesas de amor que probablemente nunca lleguen a cumplir, por él anexo del bar están varios chicos y chicas disfrutando de un tequila. Y en el rincón menos frecuentado, esta ese hombre llevándose la taza del humeante café a la boca, mientras con la otra mano sostiene un libro.  Su mirada se pierde en lo escrito. Y solo puedo pensar pobre ¡esta más solo que yo!.

Al terminar mis alimentos, le solicito a la mesera que me extienda la cuenta, siempre con su amable sonrisa y deseándome un buen fin de semana me la da y procedo a realizar el pago correspondiente.

Vaya olvide que es viernes y que laboralmente se termina la semana. Me despido de ella y camino las 2 cuadras que me llevan de nuevo a la oficina.

Ohh, me cruzo con varios compañeros. ¡Hola al rato nos vemos!  Buen provecho. son los intercambios de palabras entre nosotros.

Entro a recepción y como siempre mensajes de todo el mundo. ¡Qué falta esto! ¡Que tengo reunión la próxima semana! ¡Que no se me olvide gestionar ciertos asuntos! 

Vuelo a mi lugar, todo tranquilo algunos no están se fueron a comer.

Todo regresa a la normalidad.

Pasa el tiempo y recuerdo que tengo que llamarle a Erika hoy acordamos vernos.  Otro viernes en el que ir a cenar, al cine y terminar la noche juntos es común.

Terminó mi llamada y como lo dije. Así será mi viernes, como muchos otros han sido.

Ha finalizado el día laboral. Mi compañera de a lado corre, tiene 3 años que se caso y aun sigue enamorada como el primer día. (un día, despertará y se dará cuenta que dejo de amarlo). A el buen amigo del último lugar, como siempre llamándole a su novia para decirle que va a su encuentro. A la chica de 20 años, siempre enamorada del amor, hoy corre a la cita de su vida, por fin acepto la invitación de su enamorado. Otros más corren a casa a ver a sus hijos y otros organizan la partida de billar o boliche, siempre tratando de armar un equipo y nunca lo logran.

Termino mi día por última vez checo que todo este en órden no quiero sorpresas el lunes siguiente.

Pasan las personas y me desean un buen fin de semana. Me dispongo a apagar mi computador y precisamente en ese momento llega un correo a mi buzón personal de hotmail.

Olvidalo, lo leo el lunes o si puedo en casa. Pero algo me lleva a detenerme para revisar.

Jaja, lo que suponía ¡un correo cadena! 

Pero aún me siento extrañado por recordarte la noche anterior.

Así que busco ese correo que un día me escribiste y no le encontré razón.   «Cuando el amor está a tu lado, solo tienes que voltear la mirada para ser feliz» Ahora entiendo que me amabas y nunca lo quise ver.

¿Dónde estarás?

¿Cómo te encontrarás? 

No lo se, y es cuando me consume la duda, pero dejemos el sentimentalismo a un lado. Para que recordar algo que ya se fue y que nunca existió.

Mejor, me apresuro a ir a mi encuentro. Una cena, el cine, unos tragos y a donde la noche nos lleve. 

Llego al lugar acordado.

Una plaza comercial. Miro los aparadores hay muchas cosas, para todos los gustos, para todos los bolsillos. Camino apresuradamente a mirar la cartelera, si aun existe tiempo para cenar y para esperar tranquilamente el inició de la película. 

Creo que después de la película nos quedamos en el bar que esta en la misma plaza, sería más problemático decidir ir a otro lado.

Suena mi móvil. Es ella ¡Erika! notificándome que esta en un embotellamiento que tardará más tiempo del esperado y estima que una hora o más le costará la demora. Me pide que la espere y pienso mejor irme a casa y disfrutar una película por cable.

Pero no puedo negarme, así que le comento que no se desespere que Aqui estaré esperándola.

Me dirijo al centro de la plaza, ahí quede de encontrarme con ella.

Llego y me siento al lado de un basurero con cenicero encima. Muero por un cigarro, busco mi cajetilla, que esta casi llena, creo que estoy dejando de fumar y eso es bueno para mi salud y me rio yo solo. Saco el encendedor y magistralmente tengo ya el cigarrillo en mi boca.

Lo enciendo y doy una bocanada bastante prolongada, debe encender bien y a la vez darme ese placer que me encanta. Cierro los ojos y lo disfruto, que sensación es un vicio pero a pesar de ello no se le quita su encanto.

Miro el piso, me siento como adolescente esperando a su amada horas y horas para verla y decirle te quiero, eres lo más bello, te necesito. Sonrió de manera irónica.

Si, yo la veré, pero tardaré semanas en volverla a ver. Y esas frases nunca nos las decimos, ni con ella ni con otras.  

Yo no me complicó la vida con tonterías sentimentales, la vida es así sencilla y práctica.

Cuando me enamoré, cuando quise una relación estable, cuando solo pedía que me amaran, solo recibí rechazo, sin sabores y amargos desengaños. Por eso cambie a esto, hoy es Erika para la próxima semana puede ser Susana, dentro de un mes otra más.

O quizás la misma siempre, pero sin mezclar los sentimientos, cuando escuche el clásico “Mis sentimientos ya no son los mismos”, siempre salí por la puerta trasera. A pesar de ser insensible y carente de sentimientos, no he deseado dañar a alguien y por eso mejor me desaparecí de sus vidas.

Nunca he sido cruel ni he jugado con los sentimientos de chica alguna, siempre la verdad. 

Levanto mi mirada y veo el pasar de la gente, todos iguales, todos diferentes.

Mi mirada se fija en esa mujer que viene directo a mí.

¡No puedo creerlo! ¡Es improbable! Pero estas frente a mí. Quien no me permitió dormir, quien recordé ayer por un mail. ¡Esta frente a mí!

Odio al destino, odio la casualidad, detesto las probabilidades, y sin embargo estas aquí frente a mí. Te detienes y bajas tu mirada, me sonríes y das ese «Hola» que miles de veces escuche.

Te observo, tu peinado ha cambiado, tu sonrisa como siempre agradable, tu figura aun sigue siendo perfecta. Tu estilo de vestir cambio. Sin temor mi mirada recorre tu cabello, tu rostro, esa blusa blanca ceñida al cuerpo, tus jeans negros que contrastan con tu cabello castaño, tus zapatillas perfectamente combinadas con tu vestir. Llevas una bolsa en la mano derecha y tu celular en la mano izquierda lo sostienes con seguridad, pero que veo en tu dedo llevas una argolla de matrimonio.

¡INGRATA! no me invitaste a la boda. Me lees el pensamiento y giras la mano y me echas en cara tu enlace. Sonrió con ironía y respondo tu «hola» Vaya, vaya precisamente ayer estaba pensando en Tí.

Y justamente hoy vengo a encontrarte. Años después de que la vida nos separó.

Te sientas a mi lado. Como si yo te hubiera invitado.

¿Qué no sabes que espero a alguien?

 No, no lo sabes. Quiero decirte que tengo un compromiso, y no esperaba verte así que no tengo tiempo de charlar contigo.

 Pero tu mirada calla mi voz Me siento como un niño ante la maestra que lo regañara por no hacer la tarea y evado tu mirada. Y solo me dices, ¿Cómo estás?.

¿Cómo estoy?

¿Qué no me vez? Feliz de la vida, sonriendo (irónicamente) pero sonriendo.

Pienso: ¿Y ahora viene él «Que crees que me case» y soy inmensamente feliz? Al diablo, eres parte de mi pasado, y de las cosas que ya no recordaba y no me interesa tu presente. 

Estoy molesto, porque no llego Erika a tiempo, Ya estaríamos en otro lado en este instante. ¿Por qué no le dije que lo pospusiéramos? Y hace 3 minutos que no estaría aqui para no encontrarme con ella.

No, no y no

No es que este molesto, estoy asustando.

Te miro y no se qué pensar. ¿Qué me dirás? ¿Me reclamarás por no buscarte para continuar la amistad? Pero tu mirada tranquila me serena.

Solo me dices ¿Cómo estás? Y yo ya había hecho un drama en unos cuantos segundos. 

Te respondo con voz débil. ¡Bien Gracias! ¿Y Tú? 

Tu respuesta es sencilla.

Me encuentro bien. realizando unas compras solo eso pronuncian tus labios. Te quedas callada, y yo que esperaba tu comentario que me diria que te casaste que eres feliz y que todo es miel sobre hojuelas en tu vida.

Pero, no dices nada. Me observas y sonríes. ¡Siempre tan gruñón y arisco como siempre!. Sabias palabras que me definen tal como soy.

Baje la guardia y aprovechaste para preguntar ¿Tienes tiempo para tomar un café?» Mi respuesta inmediata era un No rotundo, tengo una cita y ella es muy celosa no quiero problemas.

Veo el reloj y creo que Erika llegara mucho más tarde…. Te respondo solo unos minutos.

Nos levantamos. Permíteme te ayudo con esa bolsa.

Llego a rozar tu mano y te miro extrañado como si nunca lo hubiera hecho. Deje en el olvido tus abrazos, tu mano en mi rostro cuanto estaba triste.

Tantas cosas. 

Caminamos a la cafetería.

Instintivamente te dirijo a la mesa que da un panorama al centro de la plaza, para poder observar si llega Erika. Te adelantas al ordenar un capucchino con caramelo para él y a mi solo un americano.. Te diste cuenta de mi asombro y Ries al momento que me dices aún recuerdo tu favorito.

No me queda más que sonreír.

Extiendes tu brazo y pones a un lado tu móvil, vuelvo a mirar tu argolla, luce radiante.

Te percatas de ello y me respondes «Llevo 1 año y 9 meses de casada».

Mi mente quiere imaginarte, en la iglesia dando el sí, prometiendo que siempre estarán juntos hasta que la muerte los separe. La fiesta, el brindis y rodeados de personas deseándoles felicidad.

No puedo imaginar, mejor saco mi flip-top de cigarrillos, tomo uno apresuradamente y lo enciendo. Me miras y niegas con la cabeza  “Jerry eso te va a matar” ¿Cuándo lo vas a dejar?. Tu mirada se detiene en tu argolla. ¿Quieres saber la historia?

Afirmo con un movimiento leve de mi cabeza.

Tu historia comienza. «Después de que dejamos de vernos, cambie de empresa y un año después ‘Lo conocí! Al principio el trato era sencillo y nada profundo, al menos de mi parte no quería una relación estaba dedicada a mi trabajo. Era nueva y tenia que superarme. El recibió muchos rechazos de mi parte, pero fue perseverante, con sus detalles, con sus actitudes, con la forma tan particular que tenia de tratarme. Y poco a poco fue rompiendo la frialdad que tenía, sabe como hacerme reír y sabe como hacerme llorar. Me acepto con mis virtudes y se adaptó a mis defectos. Somos muy parecidos en ciertas cosas y totalmente distintos en otras. Cuando menos nos percatamos ya estábamos enamorados en uno del otro, nos sentíamos contentos y temerosos a la vez, de que eso tuviera un final. Pero él me alentó a seguir luchando por este sentimiento que nos unía.

Hubo momentos en que pensábamos en dejar todo y despedirnos de la mejor manera, creíamos que solo era enamoramiento, cariño, lealtad y de ahí vinieron pruebas en la que tuvimos que demostrar que tan fuerte era ese amor. Pero confiábamos en que era real, que era posible que duraria y ve hoy llevo 1 año y 9 meses de casada Tenemos planes de familia, tenemos planes de crecimiento profesional y personal. Esto que vivo, no cayó del cielo y tampoco el destino nos lo regalo Es resultado de nosotros y del entusiasmo y sentimiento que le ponemos día a día.

Aun casada, aun segura de un sentimiento a veces queremos claudicar ante los factores que pueden separarnos, pero nos detenemos analizamos y vemos todas las posibilidades, tomamos una y la seguimos, si nos falla, tomamos otra pero nunca nos rendimos. 

Ahh pues que bien, Felicidades por Tí.

Me alegro que encontrarás al hombre de tu vida. Me corriges. No.no, Jerry no se si sea el hombre de mi vida. Lo que si se, es que es él quien quiero en mi vida. Solo el tiempo me dirá si tome la mejor elección o si me equivoque rotundamente, pero tome la oportunidad y no la dejaré ir tan fácil.

Siempre lucharemos por estar a lado del otro, pero si llegamos a separarnos. se ira con mi agradecimiento por hacerme feliz.

Y recordando nuestro pasado. ¿Qué sucedió que ya no me buscaste cuando hubo cambios en mi empleo?  ¿Solo me dejaste ir? ¿No te importaba? ¿A dónde dejaste esas sonrisas y esos buenos momentos? Es tarde para los reclamos. Pero quiero saberlo. ¿Éramos amigos o al menos eso creía? ¿O que te diste cuenta que estaba enamorada de Tí y no quisiste un problema en tu vida? ¿No sentías lo mismo y preferiste alejarte? ¿O si era  lo mismo que a mí y te dio miedo el afrontarlo?.

¿Lo recuerdas? Yo solo puedo responderte, que no sabía que pasaba en mis sentimientos, no era de mi eso del querer y mucho menos el ilusionar a alguien sin motivo.

¿Por qué tenía que hacerte perder el tiempo? Con algo que no tenía futuro.

Además, no era lo más adecuado.

¿Adecuado para quién? ¿Para Tí? 

No, yo creo que para Tí, no hubieras sido feliz a mi lado, ya sabes cosas comunes que nos separaban, era algo que no debía ser en ese tiempo.

¿Y cuándo era el tiempo?

A caray, no se cuando, las cosas fueran diferentes tal vez, no se es más siempre te vi como una amiga, eras quien me hacía sonreír, con quien compartía gustos, hobbies, tiempo.  

Esta bien Jerry, te creo nunca sentiste amor por mí. ¿Entonces si así fue?  ¿Dime por qué? algunas veces me mirabas de una forma especial, ¿Por qué? siempre preferías salir conmigo y no con otra chica que llevarías a la cama. ¿Por qué te conocí tanto? ¿Por qué no podías dejar de llamarme escribirme y buscarme? ¿Por qué? se tus secretos más escondidos, ¿Por qué? Se que te hace reír y se que te lástima ¿Por qué? sabias tan bien que regalo darme en mi cumpleaños resultando ser el más especial ¿Por qué? se tu forma de pensar de actuar. ¿Solo por ser tu amiga?

  Ahh, te respondo que contigo todo fue diferente.

Entonces ¿Quizás nunca quisiste mirar y escuchar a tus sentimientos?  Y es algo que nunca vas a saber. Tristemente así es. Nunca sabrás si pudimos ser algo más, nunca sabrás si en mí estaba tu felicidad como pareja.

Oye, pero entiende que pudo ser una fantasía, una ilusión.

Así es no pierdo de vista esa parte, pero nunca dejaste que la fantasía o la ilusión se hiciera realidad. Pudo ser, pero te negaste a experimentarlo. Preferiste la comodidad de tu vida y no conocer algo nuevo para Tí. No soy yo quien te puede decir que pudo ser maravilloso, fantástico, probablemente hasta fuera una estupidez. Pero nunca lo intentaste. No te reclamo nada, es más creo que todo pudo ser un sueño que yo misma forme.

Las cosas cambiaron y los sentimientos también, yo tuve dudas, mis temores me detenían a enamorarme nuevamente, pero me lance al vació y afortunadamente cai de pie. Y por eso estoy casada.  Pero analiza, no todas te harán daño, no todas llegaran y se irán poco tiempo después. Pero si no te dejas querer, no habrá más que lo que tienes.

 —— Llega el café—–

¿Será cierto lo que ella dice? ¿Existirá algo más que solo lo que tengo? 

No, tu estas mal, mi vida es perfecta, sin complicaciones, sin te quiero, sin te amo. ¿Por qué ahora que estoy frente a ti dudo? De mi agradable vida. Tengo que decirte que estas equivocada. Pero no puedo la duda me carcome el pensamiento. Volteas a ver tu reloj.

¡Maldita sea! en el mejor momento de mi vida apareces Tú y me quieres enseñar que es el amor. Y demostrarme que el camino no es tan recto como yo creí.

Jerry, me tengo que ir.. ya es tarde. Solo te recomiendo, cuando alguien aparezca en tu vida y sea diferente dale esa oportunidad y date esa oportunidad. Los riesgos son eso riesgos, llenos de incertidumbre, de incredulidad. pero si decides a tomarlo puedes hallar algo grandioso. Me voy me dio gusto verte, no se si volvamos a encontrarnos, pero no olvides lo que hoy comentamos.

Sacas unos billetes de tu cartera y niego con la cabeza. Me levanto y nos damos el último abrazo. Te veo tomar tu celular, y tu bolsa, das media vuelta y caminas por ese pasillo.

Y te pierdes en la lejanía.. Te vuelves a ir de mi vida.

Mesero, ¡La cuenta!

A los pocos minutos llega Erika y como siempre otro viernes.

Al anochecer del sábado. Observo nuevamente mi buzón electrónico, sigue ahi tu correo. Ahora si lo borro, pero dejo grabadas tus palabras en mi mente.  «Cuando el amor está a tu lado, solo tienes que voltear la mirada para ser feliz» Deje que mis pensamientos acabarán con mis sentimientos. Tenías razón.

Ahora sé que tu no eras quien yo tanto esperaba, porque no quise voltear a verte.  

Loading

¿Qué te ha parecido este contenido?

¡Haz clic en una estrella para puntuarlo!

Promedio de puntuación 0 / 5. Recuento de votos: 0

Hasta ahora, ¡no hay votos!. Sé el primero en puntuar este contenido.

¡Siento que este contenido no te haya sido útil!

¡Déjame mejorar este contenido!

Dime, ¿cómo puedo mejorar este contenido?

¿Cuál es tu reacción?
+1
0
+1
0
+1
0
+1
0
+1
0
+1
0
+1
0

+ No Hay Comentarios

Añade el Tuyo